Uno de los pilares fundamentales para mí como terapeuta es el acompañamiento en el dolor desde un lugar muy humano. Reconozco que cada persona tiene su propio ritmo y tiempo para sanar, y para mí es importante respetar y honrar ese proceso. Con empatía y compasión, buscaré brindar un espacio seguro donde podrás expresar tus emociones y explorar tus pensamientos sin juicio alguno.

Desde el enfoque humanista integrador tengo influencia de distintas corrientes psicológicas (Gestalt, Cognitivo-Conductual, Sistémica, Psicoanálisis y Tercera Generación).

A través de estos enfoques podremos dirigirnos a atender tu presente, pasando por la integración de tu pasado y la construcción y proyección de tu futuro. De esta forma no solo resolveremos el síntoma, que es el malestar que te hace acudir a terapia, sino que iremos a la raíz para descubrir la causa y atenderlo de una forma más profunda.

Como si de un iceberg se tratase, no solo miraremos la parte que está en la superficie, sino que bucearemos para mirar lo que se encuentras en el fondo de forma más oculta.